Dolor y esperanza

Hay tiempos en nuestra vida en que la esperanza es fácil. Son periodos, podríamos decir, de Navidad en nuestro corazón. Cuando uno es joven y la vida está por delante, todo es esperanza. A veces, incluso, se tiene la alegría de saber que esta esperanza se verá, con mucha probabilidad, colmada de realidades.