[audio:https://hoja.claraesperanza.net/wp-content/uploads/2011/10/dichos-y-hechos-de-paz.mp3|titles=Dichos y hechos]Audios: Dichos y hechos

“Del dicho al hecho, hay un trecho”, dicen algunas personas, pero… ¿siempre es así?

Son muchos los dichos, refranes, proverbios y frases de personas célebres que se han pronunciado, a lo largo de la historia, sobre la vivencia de la paz, tanto a nivel social como a nivel personal. Sirven de ejemplo los siguientes:

“Si hay luz en el alma, habrá belleza en la persona;
si hay belleza en la persona, habrá armonía en el hogar;
si hay armonía en el hogar, habrá orden en la nación;
si hay orden en la nación, habrá paz en el mundo.”
Proverbio Chino

“El corazón en paz ve una fiesta en todas las aldeas.”
Proverbio Hindú

“El fruto del silencio es la oración, el fruto de la oración es la fe, el fruto de la fe es el amor, el fruto del amor es el servicio, el fruto del servicio es la paz.”
Madre Teresa de Calcuta

“Por eso América: si quieres la paz, trabaja por la justicia.
Si quieres la justicia, defiende la vida.
Si quieres la vida, abraza la verdad, la verdad revelada por Dios.”
Juan Pablo II

 

Pero también son muchas las “iniciativas” que se llevan a cabo entorno al trabajo por este anhelo tan inherente al ser humano. Iniciativas que, a veces son cotidianas e incorporadas en nuestro actuar día a día, y, otras, son fruto de un trabajo más explícito a través de instituciones y entidades.

La paz empieza en cada uno, brota de dentro afuera y llega, así, a la sociedad. Pero no sin obstáculos. El ser humano tiene cierta tendencia al dominio y a la explotación de otros y, por lo tanto, la paz requiere de un esfuerzo personal. No olvidemos que la persona tiene capacidad para hacer el bien, pero también la tiene para hacer el mal, y si no, contemplémonos y contemplemos nuestro alrededor.

Una forma de trabajar en la construcción de una sociedad en paz, es a través del cultivo de la amistad. Ser amigos significa querer y aceptar al otro en lo que es y en lo que algún día llegará a ser –porque las personas cambiamos a lo largo de nuestra vida–.

La amistad requiere tiempo, dedicación, delicadeza, creatividad y respeto total a la libertad del otro. Pide aceptar el límite humano y el pecado… y perdonar. Pero también regala gozo, ternura, alegría y paz, y es una premisa básica para lanzarnos a trabajar juntos en pos de un mundo más solidario y gratificante, como hacen muchas personas y entidades.

Por Marta Miquel Grau
Voz: Claudia Soberón
Música: Manuel Soler, con arreglos e interpretación de Josué Morales
Producción: Hoja Nuestra Señora de la Claraesperanza