Un Mural de Valores

Muchos de nosotros crecimos convencidos de que nuestros valores eran los más acertados para construir una vida plena, tanto en lo personal como en lo social. Sin darnos cuenta, intentamos —a veces incluso con cierta insistencia— transmitir nuestras creencias y modos de vida allá donde íbamos. Estábamos


Dios nos llama a que seamos santos. Y el primer paso para caminar hacia la santidad es reconocer con humildad lo que uno es. La humildad no significa que hemos de menospreciar nuestra forma de ser, o considerarnos inferiores a lo que somos. Ser humildes