La belleza de la cruz

Me contaron no hace mucho que un niño pequeño, al entrar en una Iglesia, se topó de frente con un crucifijo de tamaño natural. El niño arrancó a llorar desconsoladamente gritando a su madre y a todos los que veía pasar: “¡bajarlo de ahí, bajarlo de ahí, está sufriendo mucho, se va a