Unión de voluntades

Cuando nos dirigimos al Padre con la oración que Jesús nos enseñó, el Padrenuestro,  hay un momento en que le pedimos: “hágase tu voluntad…”. Este “hágase tu voluntad”, formulado así, podría parecer como si le diéramos una orden a Dios o cediéramos ante un pulso de fuerzas y acabáramos diciéndole que haga lo