Alfredo Rubio de Castarlenas

Alfredo Rubio de Castarlenas2022-03-31T16:03:46+00:00

En el XIV aniversario de la muerte de Alfredo Rubio de Castarlenas iniciamos una nueva sección que reúne parte de su producción teológica, filosófica y poética. El P. Alfredo Rubio fue inspirador de la Hoja de la Claraesperanza, deseó profundamente y trabajó para que ésta se difundiera por América, el continente de la esperanza, y de ahí al resto del mundo.

Hombre de amplia formación humana y viajero incansable por todo el mundo, atento a la realidad en todos sus aspectos y entusiasta de lo existente, inquieto por saber, con interés por todo, de escucha atenta y pluma ágil pero en absoluto banal.

Una de sus cualidades más significativas fue la de formular un pensamiento hondamente vitalista y sinceramente humilde. Su conciencia de que podía aportar algo al conjunto de la sociedad era tan fuerte como la certeza de que el diálogo con personas serias y sensatas, provenientes de todos los saberes o experiencias, le enriquecía.

Junto con otras personas que compartían su misma sensibilidad, creó el Ámbito de Investigación y Difusión María Corral con la convicción de que los medios de comunicación social eran un instrumento valioso e indispensable de la cultura contemporánea y que tenían que ser provistos de contenidos adecuados para el bien de todos los miembros de la sociedad.

Apuntes biográficos

Alfredo Rubio había nacido en Barcelona el 12 de julio de 1919. Hijo de la poetisa Marina de Castarlenas y del industrial textil Federico Rubio.

Su infancia transcurrió en un ambiente frecuentado por artistas e intelectuales. Estudió el bachillerato en el Politécnico Eulàlia de Sarrià.

A los 17 años tuvo que vivir la guerra civil, tiempo en que conoció y profundizó en el existencialismo de J. P. Sartre y  A. Camus. A partir de esta filosofía se cuestiona la existencia humana y su sentido.

En 1938 se ve obligado a ir al frente de guerra, donde fue asistente de un capitán. Había iniciado estudios de arquitectura, pero el peso de la guerra le empujó a estudiar medicina. Fue profesor adjunto de Patología Médica y de Historia de la Medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad de Barcelona.

A los 28 años inició la preparación del sacerdocio, realizando estudios de Teología en la Universidad Pontificia de Salamanca y en la Universidad Pontificia Gregoriana de Roma, donde más tarde llevaría a cabo la Licenciatura y posteriormente el doctorado. Fue ordenado sacerdote el 19 de marzo de 1953.

Después de su ordenación dirigió el Colegio de Nuestra Señora de los Rosales, en Madrid. Más tarde fue administrador en el Colegio Español de Montserrat en Roma.

Entre 1956 y 1958 recorrió varios países de Latinoamérica. Posteriormente, estando en México, redactó las bases de su pensamiento: el realismo existencial. Éste ayuda a descubrir la maravilla que significa el existir, y las amplias consecuencias que esta toma de conciencia puede conllevar.

Entre sus muchas obras está la fundación de la Casa de Santiago para la formación de vocaciones sacerdotales adultas, y también la Asociación Grupo Claraeulalias, que promueve un estilo femenino de vida contemplativa y activa siendo laicas dentro de la Iglesia.

Fundó asimismo la Universitas Albertiana. Es co-autor de la «Carta de la Paz dirigida a la ONU», que redactó durante un viaje a China. Puso en marcha la Revista RE, en sus versiones castellana y catalana, para difundir el realismo existencial.

En sus numerosos escritos filosóficos, poéticos y narrativos se manifiesta su pensamiento, profundamente arraigado en la realidad y sus evidencias, y su enorme interés por la persona y su formación integral.

LISTADO DE ARTÍCULOS

Te amo Señor, a veces sin saberlo

El poeta se descubre amando a Dios en todo momento y en todo lugar. Cuanto más se desvanece su ego, más crece la presencia del Creador. Soneto XXXVI Te amo Señor, a veces sin saberlo. Sin darme cuenta, yo te estoy amando cuando a través del campo voy cantando, olvidado

Señor, que estás en el envés

Poema: Alfredo Rubio de Castarlenas (Barcelona, 1919-1996) Música: Manuel Soler Voz: Montserrat Español Grabado en el oratorio de la Murtra Santa María del Silencio (Chiu-Chiu, Chile) Producción: Ámbito de arte de la Universitas Albertiana Barcelona, 7 de mayo de 2019

Estás aquí. Te creo muy cercano

“Soneto I”, del libro Sonetos en la Ermita, de Alfredo Rubio de Castarlenas (Barcelona, 1919-1996). El poeta experimenta la cercanía de Jesús y, a la vez, comprueba un alejamiento propio y la necesidad de búsqueda Estás aquí. Te creo muy cercano. En Ti respiro la serenidad y con gozo ahondaré tu

Grados de humildad

El término humildad viene del latín humilis que se traduce no solamente como ‘abajarse’ sino también como ‘humus’ o tierra, ya que en el pasado se pensaba que las emociones, deseos y depresiones eran causadas por irregularidades en las masas de agua. Debido a que el concepto alberga un sentido

Resurrección, ellos cuentan su historia

Teatro EFUSIÓN presenta el musical RESURRECCIÓN, ELLOS CUENTAN SU HISTORIA. Obra presentada por primera vez en mayo del 2009 en el Teatro Nacional de Santo Domingo. Primera parte

Resurrección, ellos cuentan su historia

Teatro EFUSIÓN presenta el musical RESURRECCIÓN, ELLOS CUENTAN SU HISTORIA. Obra presentada por primera vez en mayo del 2009 en el Teatro Nacional de Santo Domingo. Segunda parte

Resurrección, ellos cuentan su historia

Teatro EFUSIÓN presenta el musical RESURRECCIÓN, ELLOS CUENTAN SU HISTORIA. Obra presentada por primera vez en mayo del 2009 en el Teatro Nacional de Santo Domingo. Tercera parte

¿Dónde encontrar la Esperanza?

San Pablo nos dice rotundo: Sé de quién me fío. Del Señor Jesús. No tenemos que ser norte de nosotros mismos, poniendo nuestros deseos en cosas que no son acordes con nuestro verdadero bien, con nuestra salvación. Pidamos en cambio a Dios lo que, de verdad, sea bueno para nosotros.

Esclarecer la esperanza

Por Alfredo Rubio de Castarlenas . Hoy día muchas personas lamentan la ausencia de razones para tener esperanza. Y sin embargo casi todo el mundo quiere tenerla. La persona humana siente hambre y sed de esperanza, pero muchas veces este anhelo es difuso y también, desgraciadamente, oscuro. A pesar de

No te temo, Señor, que eres mi amigo

SONETO XXXII No te temo, Señor, que eres mi amigo Sólo temo no amarte lo suficiente; o sea sin ardor, cual inconsciente de tu gigante amor para conmigo. Quiero quererte más, No lo consigo a pesar de mi esfuerzo permanente. Debería vibrar divinamente para poder mejor estar Contigo. Envíame tu