Quien a buen árbol se arrima…
El deseo de orar toma muchas y diversas formas a la hora de concretarse. Porque la oración es una expresión privilegiada de la relación con Dios. Así que, como toda relación interpersonal, se concreta según el talante, las circunstancias, el momento, el motivo… La oración pasa a menudo por la palabra, pero necesariamente