La nación insomne
Dios para unos, la madre naturaleza para otros, nos han regalado el sueño. El sueño reparador, cobijado por el mayor silencio y la mayor oscuridad de la noche.
La misma tierra bajo nuestros pies, nos ofrece su horizontalidad para el descansado olvido de nosotros mismos. Para soñar dormidos o en duermevela.